jueves, 19 de marzo de 2020

6 películas "malas" que eran feministas y no lo sabíamos

Voy a ser clara: no por ser feminista significa que estoy de acuerdo con esta nueva moda de hacer que todas las películas lo sean (o pretendan serlo), ni con esta nueva ola de refritos que nadie ha pedido (como "Ghostbusters" o el más reciente, "Los ángeles de Charlie"), ni con el dichoso empoderamiento. Con respecto a este último tengo una explicación súper mamila relacionada con mi afición por la crueldad ética en el arte y que, en palabras menos pretenciosas, básicamente se resume a que hacer heroínas con súper poderes, súper fuerza o "badass" no es más que un efecto placebo y que un arte más feminista, en mi opinión, debe ser crítico, crudo e incluso incómodo, pues sólo así se mueve a la reflexión mientras que lo otro sólo perpetúa esas ideas falsas de que tú, mujer del común, puedes aspirar a ser como personajes a los cuales quizás jamás te parezcas porque una cosa es la ficción y otra la realidad. Y bueno, eso.

Y en cuanto a lo primero que señalé, diré que esta moda de meterle feminismo -mal ejecutado muchas de las veces- a absolutamente todo o de hacer remakes innecesarios no sólo resulta chocante y forzado y puede incluso lograr un efecto contrario a lo que pretende -que es concientizar-, sino que perpetúa esa idea hasta cierto punto soberbia y arrogante de que antes la crítica a los roles o a los estereotipos no existía y que el feminismo es más bien una cosa de ahorita y bueno, nada está más lejos de la realidad. La opresión de la mujer seguro es algo que ha inquietado tanto a mujeres como hombres de todas las épocas porque el inconformismo, la rebeldía y el espíritu crítico ciertamente no se inventaron en el siglo XXI y algunas pruebas de esto las tenemos en obras literarias de los Siglos de Oro como El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha (siendo el personaje de Marcela el más representativo y transgresor en este aspecto) o el ya conocidísimo poema "Hombres necios que acusáis..." de Sor Juana Inés de la Cruz quien, cabe decir, llegó a disfrazarse de hombre y a utilizar pseudónimos masculinos.

Y, pese a que los dos ejemplos que acabo de mencionar tienen que ver con figuras que hoy en día la gente incluso sacraliza e idolatra por el legado que han dejado en el mundo de la literatura, la realidad es que tanto Miguel de Cervantes como Sor Juana fueron gente de lo más normal en su momento. Sor Juana perteneció a la clase media y fue menospreciada por muchos por ser mujer mientras que Cervantes vivió en la pobreza gran parte de su vida e incluso en su momento fue opacado por Lope de Vega. ¿A qué pretendo llegar con esto?, a que las ideas transgresoras o progresistas pueden venir literalmente de cualquiera y en cualquier época y a que no se necesita como tal ser una mente revolucionaria o tener un doctorado o los bastos conocimientos para creer que algo como la equidad existe, y sobre esto voy a hablar en esta entrada.

Como el título lo da a entender, voy a hablar de películas consideradas "malas" o que al menos no entran en lo que se conoce como "cine de arte" sino que se hicieron con el único fin de entretener. Puede sonar contradictorio dado que desde el primer párrafo de este texto hablo sobre "crueldad ética en el arte" y hasta hace poco mencioné a autores clásicos de la literatura universal. No obstante, y como ya dije, mi propósito con esta entrada es, básicamente, probar que no se necesita meter un mensaje con calzador, pues cuando un creador concibe el mundo de cierta manera, se nota, y no hay que ser el gran artista para dar un buen mensaje.

Cabe mencionar, casi todas las cintas de este listado, si bien no son completamente actuales, tienen relativamente poco tiempo de haber salido y las razones para escogerlas se limitan a

1) Son de mi época, lo que vuelve más fácil hablar de ellas.
2) Prueban lo que dije desde el inicio: productos con buenas intenciones y buenos mensajes ya se hacían desde antes de que surgiera esta nueva ola de películas forzadas.

Sin más que añadir, comencemos.

1. "Gigoló por accidente" (1999)


¿Cómo es que una cinta sobre un limpiador de acuarios que comienza mirándole las chichis a la chica de la tienda de peces y que termina endrogándose y en la necesidad de vender placer por andarle jugando al equilibrista en la casa de un hombrezuelo es feminista? Simple: su historia de deudas y de lo que debe hacer para poderlas saldar no es más que el pretexto para tocar uno de los temas más recurrentes de la película, que es la necesidad de las mujeres por sentirse comprendidas y aceptadas. "Gigoló por accidente", tanto la 1 como la 2, presenta a mujeres diferentes que se salen de la norma y de lo que el imaginario común considera "atractivo", así como también le da voz al Síndrome de Tourette, a trastornos como la narcolepsia y a la discapacidad. No sólo muestra preocupación por lo que las mujeres buscan al momento de salir con alguien, sino que es incluyente y hasta aborda, quizás de manera superficial, el tema de la masculinidad frágil, representado en este caso por el detective Chuck Flower, quien se siente acomplejado y amenazado por los gigolós debido a las proporciones de su miembro viril.

Una película que valdría la pena remirar con la perspectiva de esta nueva década, sin duda alguna.

2. "Pequeños traviesos" (1994)



¿Una película infantil, Nikte?, ¿pero tú estás bien?

No, no estoy bien, gracias por preguntar. Y sí, estoy incluyendo una película infantil y la verdad me extraña que nadie se haya dado cuenta de que es feminista cuando es más que obvio. Es más, no sólo es feminista, sino que es de una genialidad narrativa que ya quisieran muchas películas adultas y, definitivamente, considero que es un producto audiovisual que todos los niños deberían de ver sin importar la época.

"Pequeños traviesos" comienza como de hecho comenzarían muchas historias de niños de la vida real: con guerra de sexos y niños quejándose de la cursilería de las niñas, así como niñas quejándose de la pendejez de los niños. Una historia de lo más normal que absolutamente todos vivimos en preprimaria y hasta en primaria, cuando la hormona no estaba tan loca y jurábamos y perjurábamos que guácala los besos y más guácala esa cosa conocida como la follación. Y sin embargo, desde el principio nos va introduciendo a un personaje masculino que se niega a seguir los roles que la sociedad -en este caso, sus amigotes- le quiere imponer. Alfalfa es un romántico, es sensible, es tierno, sentimental, ama cantar y, aunque nunca lo expresa con esas palabras (porque pues o sea, es un niño y no habla español, no mamen), puede decirse que se la pela la masculinidad tóxica y, aun así, al final prueba que se sabe defender y que si no pelea ni golpea es porque simple y llanamente no le gusta, pero de que puede, puede. Paralelo a esto, nos introduce a Darla, una chamaca que resulta ser más cabrona que bonita y que también es buena competencia para las carreras, lo que desemboca en que le dé su buena callada de hocico al machote antimujeres de Spanky. Casi llegando al final, se nos revela que A.J. Ferguson, el piloto a quien Spanky idolatraba, en realidad es mujer, lo que le vuelve a callar el hocico y lo hace replantearse su filosofía de vida, razón por la cual reconsidera las cosas y acepta que pues igual y los cambios no son malos. Y bueno, ni hablemos de la escena donde dos nenes se visten como bailarinas de ballet, ¿así o más transgresora?

3. "Legalmente rubia" (2001)


"Has perdido la chaveta, Nikte". Eh...sí, la perdí creo que desde la secundaria, pero eso no quita que tenga razón. Y es que...¿qué es más feminista que una mujer luchando contra los estereotipos, siendo fiel y leal a lo que ella es y eligiendo amarse por encima de todo?

"Legalmente rubia" es, a secas, una historia de evolución de personaje. Una historia donde Elle comienza derrotada debido a que el novio la dejó por no considerarla lo suficientemente lista, una historia donde ella, aun cuando a su manera pudo entrar a la universidad originalmente lo hace por aceptación masculina, una historia en la cual ella decide que no va a dejar que la sigan humillando, una historia en la cual decide estudiar y aprender sin por eso renunciar a lo que es -o sea, una chica que ama verse bien porque, ultimadamente, no está peleada una cosa con la otra-, una historia donde demuestra que de hecho gracias a que es quien es puede ser genial y brillante a su manera, una historia en la cual elige el amor bonito y descarta el tóxico y una historia en la cual, como lo prueba su secuela, termina trabajando por el bien común y ya no la mueven ni la aprobación masculina ni el ego.

¿Siguen pensando que no es feminista?

4. "Hagamos una orgía" (2015)


¿Una película que mezcle cuerpos no canónicos, en la cual se aborden diferentes maneras de "pecar sin concebir" y que critique el slutshaming? Sin duda, todos estos elementos los agrupa la cinta "Hagamos una orgía".

Siendo quizás la película más reciente de todas las que conforman esta lista, "Hagamos una orgía" cuenta la historia de Cassie, una columnista de temas sexuales que en su juventud se ganó fama de zorra por correr en topless en su pueblo después de que la cacharon en plena caricia con su compañero Adam y tuvo que salir despavorida de ahí. Ahora ya adulta, se ve obligada a volver tras recibir la noticia de que su madre ha muerto, sólo para encontrarse con que aún siente cosas por su ex amante, quien ya rehizo su vida como de hecho lo han hecho todos en ese pueblo.

Su regreso le da a Cassie la oportunidad de organizar una orgía con sus conocidos, lo que asimismo le proporcionará material para su nuevo libro sobre sexualidad. Sin embargo, sus antiguos compañeros aún son un tanto conservadores y de hecho ella podría no ser tan liberal como quiere dar a entender, lo cual tampoco impedirá que las cosas tomen su curso.

"Hagamos una orgía", sin querer dárselas de progresista, da a entender que, en el sexo, todo se vale mientras sea consensuado. Coger con amor está bien, coger sin amor también, ser virgen también, estar bastante corrido también y tener sexo homosexual sin ser homosexual (o sexo heterosexual sin ser heterosexual) también se vale si es lo que hay o lo que se antoja. No todos tienen por qué verse como estrellas porno y sí, la chica más ardiente puede tener química sexual con el wey más torpe y nerd y no pasa nada.

El final es, además, una de las cosas más bonitas que he visto en una película. Pero no caeré en (más) spoilers, mejor véanla.

5. "Notas perfectas" (2012)


Combinemos a un grupo de mujeres diversas en más de un sentido, música chida y referencias a "The breakfast club" y obtenemos esta joya del cine contemporáneo.

"Notas perfectas" está entre mis películas favoritas de la vida no sólo por el soundrack y por el obvio hecho de que, al ser cantante frustrada, mucho de lo que tiene que ver con hacer covers o ganar concursos de canto suele ponerme sentimental y súper feliz, sino porque tiene, en mi muy personal y subjetiva opinión, una de las escenas más feministas que he visto en una película y una de las mejor trabajadas por su sutileza. Me refiero, por supuesto, a aquella en la cual Beca termina, por fin, de ver "El club de los 5", llora con el final de la cinta y proyecta la historia de sus amigas del grupo a capella con la historia de los 5 chicos de la película, descubriendo que todas son distintas entre sí pero que la amistad que han logrado forjar gracias a la convivencia es inquebrantable, siendo esta misma unión lo que las hace ganar, por primera vez, el concurso nacional de a capella.

Esta película conjunta a todo tipo de personajes variados que de entrada podrían parecer estereotipos como en cualquier otra película del estilo pero cuyos puntos débiles terminan jugándoles a favor. El gusto por el sexo de Stacy se aborda sin slutshaming y hasta le da la oportunidad de lucirse en el escenario aunque sea por un momento, el talento que tiene Lily para el beatbox también se ve explotado en las finales y Fat Amy no es retratada como la típica chica gorda a la que nadie hace caso; por el contrario, la ponen como alguien perfectamente capaz de atraer a quien quiera y que además es segura de sí misma.

Si no la han visto, ahora es cuando.

6. "Pequeñas grandes amigas" (2003)


Cuando se habla de sororidad y apoyo entre mujeres, la primer imagen que podría aparecer en la mente es la de un grupo de chicas de veintitantos con pañuelos verdes, pero...¿y si el apoyo no proviene necesariamente de personas de la misma edad?

"Pequeñas grandes amigas" habla de la relación en un comienzo laboral y por compromiso que sostienen una veinteañera ex millonaria e inmadura que acaba de perderlo todo y se ve forzada a buscar trabajo y una niña rica de ocho años demasiado madura para su edad -por no decir amargada-. La relación se va tornando amistad de la buena, en la cual ambos personajes crecen justamente gracias a la relación que mantienen y en la cual Molly aprende a ganarse la vida y a perderle el miedo a madurar mientras que Ray aprende a no reprimir sus emociones, a comportarse más como una niña de su edad y a dejar de verlo todo de manera tan rígida y conservadora. Eso, sin mencionar la dependencia extraña que Molly en un inicio genera hacia Neal y que, casi llegando al final, se muestra superada.

* * *

En fin, por el momento se me ocurren estos títulos. Como podrá verse, no llevan un orden cronológico y la razón es que preferí ordenarlas de "menos favorita" a "favorita". Por supuesto, se aceptan recomendaciones, así como su respectiva justificación.

...noches ;P